Por la Dra, Pamela Echeverria. - Experta en derechos de propiedad intelectual.
Las marcas son todo signo con capacidad distintiva que permite diferenciar los productos o servicios entre las distintas empresas en el mercado. Para ser titular y proteger las mismas, el registro es indispensable.
No solo porque a través del mismo se adquiere su titularidad, sino porque además, nos otorgará herramientas eficaces para defenderla ante el uso indebido de personas no autorizadas.
Para comenzar en la elección de nuestra marca tenemos que tener en claro lo principal: que puede registrarse como marca?
Así, en Argentina puede registrarse como marca:
- una o más palabras con o sin contenido conceptual;
- los dibujos;
- los emblemas;
- los monogramas;
- los grabados;
- los estampados;
- las combinaciones de colores aplicadas en un lugar determinado de los productos o de los envases
- los envoltorios; los envases,
- las combinaciones de letras y números;
- las frases publicitarias;
- los relieves con capacidad distintiva;
- las letras y números por su dibujo especial;
- Los nombres de personas o seudónimos
- Formas de los edificios
- Los olores
- Signos sonoros
- los sellos;
- las bandas; las imágenes; y todo otro signo con capacidad distintiva
Una vez que hemos definido la marca a través de la cual comercializaremos nuestros productos o servicios, debemos seguir con el siguiente paso ineludible: su registro.
Por que? Porque el registro de la marca …
- Otorga la titularidad de la misma: con el registro se obtiene la propiedad de la marca y como consecuencia, el derecho de uso exclusivo.
- Resulta menos gravoso efectuar el mismo que vernos en la necesidad luego de iniciar juicio para recuperar nuestra marca no registrada de un tercero sin interés legitimo en la misma.
- Impide su registro por parte de competidores desleales.
- Evita el riesgo de que un tercero se anticipe con un registro de marca identica o similar al que habíamos desarrollado para nuestro negocio
- Garantiza que los consumidores distingan nuestros productos. Desempeña asi la función publicitaria de identificar un producto, permitiendo que el público consumidor lo individualice, distinguiéndolo de otros similares, valorándolo en función de su calidad e informando al usuario sobre su origen.
- Sirve como instrumento de comercialización y proyecta la imagen y la reputación de una empresa o producto.
- Una marca registrada puede ser objeto de concesión de licencias, y conformarse asi como una fuente de ingresos a través de las regalías obtenidas por dichos contratos.
- Representa un factor determinante en los acuerdos de franquicia, en los fondos de comercio y en cualquier contrato en general.
- Constituye un importante activo comercial.
- Puede ser una buena garantía a la hora de obtener financiamiento.
Estos son los motivos mas importantes a la hora de decidir registrar nuestras marcas, las cuales no deben confundirse con el nombre comercial de la empresa.
Existe una creencia con relación a que al inscribir la sociedad en el organismo correspondiente, se protege así nuestro nombre: esto es errado, por cuanto el hecho de que nuestra sociedad se encuentre debidamente inscripta en el Registro Público de Comercio o Inspección General de Justicia, según el caso, bajo determinada razón social no quita que para tener la titularidad de la misma como marca, debamos realizar el correspondiente registro: el mismo es indispensable.
Es por ello, que siempre recomendamos fervientemente el registro de las marcas, logos, emblemas, frases, de nuestras empresas ya que solo a través del mismo podemos garantizar que sean nuestros.
Como reza el dicho popular, es sin lugar a dudas mejor prevenir que curar.